INSTITUTO CULTURAL DE LEÓN
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Una mirada al programa de Fenal 34

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¡Falta poco para la FENAL 2023! Con más de 270 actividades y centenares de libros esperándote, es normal sentirse abrumado; es por eso que te traemos una selección de diez presentaciones editoriales, desde novela juvenil y libro ilustrado hasta ciencia ficción experimental y crónica periodística, a las que puedes ir echando ojo:

La Visitante - Sábado 13 de mayo

Alberto Chimal (Planeta)

En su más reciente novela, el popular autor presenta una mezcla de thriller y horror sobrenatural mezclado con la historia de México, en este caso, la represión estudiantil a inicios de los años 70. Podrás encontrarlo el sábado 13 de mayo a las 17:00 horas en la Sala Efraín Huerta.

De eso no se habla - Sábado 13 de mayo

César Galicia (Océano)

“De eso no se habla es un libro que responde las inquietudes de adolescentes, jóvenes y adultos mayores sobre sexualidad, placer y deseo”. El primer libro del sexólogo César Galicia promete un recorrido divertido, informativo y por momentos personal a través de las neblinosas dudas sobre la sexualidad. Podrás escucharlo el sábado 13 de mayo a las 18:00 horas en la Sala Efrén Hernández.

Ni siempre, ni nunca (ni tú, ni yo) - Sábado 13 de mayo

Alex Toledo (Alfaguara Juvenil)

A quienes prefieran el latir de la novela juvenil, Ni siempre, ni nunca, de Alex Toledo, es una de las propuestas a revisar. Una carta de amor a la soltería que nos recuerda que la relación más importante que tenemos es con nosotros mismos. Se presentará el sábado 13 de mayo a las 16:00 horas en la Sala Efrén Hernández.

Adiós, Glinka - Sábado 20 de mayo

Arnold Kraus & Alejandro Magallanes (Sexto Piso)

El texto, escrito por Arnold Kraus con las ilustraciones de Alejandro Magallanes, empieza con la muerte de Glinka, la perrita de la familia Genauer, sirviendo como punto de partida y bella reflexión para niños y padres sobre temas como los misterios de la vida y la temporalidad. Ambos estarán el sábado 20 de mayo a las 16:00 horas en la Sala Sor Juana Inés de la Cruz.

Fieras Familiares - Viernes 19 de mayo

Andrés Cota Hiriart (Océano)

En Fieras Familiares, el zoólogo Andrés Cota nos hablará de reptiles y de él mismo en esta biografía que repasa las vivencias y el acompañamiento que estos animales le han dado desde su infancia, además de brindarnos varios datos científicos sobre ellos. Se presentará el viernes 19 de mayo a las 17:00 horas en la Sala Rosario Castellanos.

La infancia del mundo - Sábado 13 de mayo

Michel Nieva (Anagrama)

“Una mirada ciberpunk a la crisis climática. Una de las voces más singulares de la literatura argentina contemporánea”. Así se describe La infancia del mundo de Michel Nieva, una propuesta latinoamericana de ciencia ficción atravesada por las angustias del presente que va del niño dengue, un infante mitad mosca del año 2197. Se le podrá descubrir el sábado 13 de mayo a las 18:00 horas, en la Sala Efraín Huerta.

Pornografía para piromaníacos - Jueves 18 de mayo

Wenceslao Bruciaga (Sexto Piso)

Pornografía para piromaníacos, el nuevo trabajo del escritor y columnista Wenceslao Bruciaga, nos adentra en el circuito de la pornografía gay del Área de la Bahía en San Francisco, a través de tres personajes, actores de la industria con los que recorreremos este mundo de poder, drogas y sexo. Se presentará el jueves 18 de mayo a las 19:00 horas en la Sala Efraín Huerta.

A veces despierto temblando - Sábado 13 de mayo

Ximena Santaolalla (Literatura Random House)

Ganadora del Premio Mauricio Achar en 2021 por esta primera novela, la autora Ximena Santaolalla explora temas tan crudos y pertinentes como la mentalidad del soldado, la condición sudamericana y la dictadura militar. Se le podrá encontrar el sábado 13 de mayo a las 17:00 horas en la Sala María Grever.

Rabia. Crónicas contra el cinismo en América Latina - Sábado 13 de mayo

Editor: Eliezer Budasoff (Anagrama)

“Una radiografía de las grietas que se han abierto en los territorios de América Latina en los años recientes”. Ochos periodistas de distintos países latinoamericanos describen, exploran e hilan a través de crónicas las problemáticas que aquejan a la América Latina del hoy. El editor, Eliezer Budasoff, presentará el libro el sábado 13 de mayo a las 19:00 horas en la Sala Efraín Huerta.

Tenibal antsetik (Mujeres Olvidadas) - Miércoles 17 de mayo

Susi Bentzulul (Fondo de Cultura Económica)

La poeta y traductora maya tsotsil Susi Bentzulul debuta con este libro que, guiado por el feminismo decolonial, evidencia la indiferencia hacia la mujer indígena mientras denuncia y resiste frente a los poderes de la hegemonía lingüística. Se presentará el miércoles 17 de mayo a las 18:00 horas en la Sala Sor Juana Inés de la Cruz.

Recuerda que puedes consultar el programa editorial completo en la página fenal.mx.


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Experiencias plasmadas en papel

En la categoría de cuento corto de los Premios de Literatura, Iván Medina fue reconocido con mención honorífica. “… Lo único que puede parar a la escritura sería la muerte, de lo contrario, puedes seguir imaginando y creando”. Te presentamos a Iván Medina, mención honorífica en la categoría de cuento corto de los Premios de Literatura León 2022 y autor de los libros: En cualquier lugar fuera de este mundo (CONACULTA 2012), Más frío que la muerte (UAM 2017) y Lugares Ajenos (BUAP 2020), además es autor de varios textos y colaboraciones en revistas como Granuja y la revista de la Universidad Autónoma de México. Iván es un artista multifacético que goza de la recopilación de conocimiento e información de su entorno. RCA: Iván, ¿Qué te motiva a escribir actualmente? Es diverso, no hay una sola respuesta, me motiva el expresar mi descontento, experiencias, enojos, satisfacciones y alegrías. No hay algo en particular (…) Escribo de acuerdo con lo que siento y lo que me llegue en ese momento de sentarme a escribir. RCA: ¿Cómo fueron tus inicios como autor ? Nació como algo fortuito. Me gusta mucho la música y por años me he dedicado a ella. Cuando estaba estudiando la carrera en Ejecución de Guitarra, para los sones escribía la décima espinela (una composición poética española muy arcaica), ahí fue donde comencé a escribir pero con la intención de recitar al momento de hacer fandangos. (También) Mientras estudiaba otra carrera se abre una convocatoria intercampus de literatura, ya tenía reparadas algunas décimas y las mandé, para mi sorpresa gané el primer lugar en poesía. Posteriormente, me entero de una convocatoria de la Revista Opción, mando una pequeña crónica y me lo publican, entonces me di cuenta que tenía algo que decir. RCA:¿Qué es lo que te llevó a ser artista? Decir artista es un concepto muy amplio. Yo ya componía, tocaba música y había participado en eventos musicales. En el ramo de la fotografía había obtenido algunos premios. Ahora que me estás preguntando, podría decir que era un artista por mi participación en la música y la fotografía, pero llegó con mayor fuerza la literatura para poder consolidarme como uno. RCA: ¿Te ha costado trabajo consolidarte?, ¿a qué retos te has enfrentado? Es un problema el darte a conocer y vivir de eso. Me acaba de llegar un correo de una revista de Ciudad Juárez, me habían elegido un cuento y me acaban de decir que ya no me van a publicar porque ya está publicado en otro lugar. En los concursos es diferente, porque ahí sí estoy de acuerdo que las obras sean inéditas (aunque) también es importante mencionar que necesitas de las revistas para darte a conocer. Otro problema ha sido llegar a las editoriales, generalmente no te publican porque buscan autores de peso. RCA: ¿Qué temas y autores te han inspirado? La lectura es muy importante, sin embargo, estoy más con la idea de Vygotsky y de Bajtín, que hablan más de la cuestión de la experiencia. La experiencia sobre la lectura. En cuanto a las temáticas que trabajo, son diversas. Estudié Relaciones Internacionales, hay un sinfín de asuntos con tintes políticos y sociales que afectan a la comunidad y de los que me inspiro. También la música tiene mucho que ver, yo creo que eso me ayudó a escribir de una manera diferente a una formación literaria. RCA:¿Cuál fue tu sentir al saberte parte de los Premios de Literatura León 2022 ? Fue de alegría, sorpresa y satisfacción, de sentirme reconocido ante mi labor literaria. RCA: ¿De qué va tu obra y qué necesidad satisface para ti como artista? Almendra surge de la intención de querer honrar la existencia de uno de los lugares míticos de la Ciudad de México, el Salón México. Construir una nostalgia de ese momento pasado que está ligado con la música y sobre todo con las intertextualidades, con el danzón y la obra de José Revueltas. Yo quería honrar tanto la música del danzón como al Salón México. Y así surgió, de repente reunes las ideas, lo cocinas en tu mente hasta que algo detona. RCA: ¿Qué representa para ti presentar tu pieza en Fenal 33? Es una satisfacción muy grata. Me siento honrado que reconozcan mi labor literaria. Además, siendo un estudiante del Doctorado en Literatura de la Universidad de Guanajuato, me siento con doble orgullo y me da los incentivos para seguir escribiendo y conocer a los nuevos escritores. RCA: Una pregunta extra para terminar ¿En qué estás trabajando actualmente? Estoy en espera de algunos dictámenes, tengo material de dos libros, espero sea positivo cualquiera de los dos son dos obras diferentes. Tengo algunas ideas que se están cocinando, pero insisto, este reconocimiento me da nuevos bríos para seguir creando y seguir. Yo creo que esto lo único que lo puede parar sería la muerte, de lo contrario, puedes seguir imaginando y creando todo con base a la imaginación y tus propios límites. Schack (Fragmento) El ajedrez no es como la vida… Es la vida. Justo como el teatro. Fernando Arrabal A Robert Fischer Seguido me veía ante mi contrincante observando el tablero. Yo jugaba con las piezas negras, aunque siempre opté por las blancas. Sus movimientos daban prueba de un arte tan exacto igual al del músico o el del pintor, donde todo cambia, los colores, las densidades, hasta el ritmo del aliento, y donde nos encontramos con la muerte o lo divino. Cuando a punto estuve de acometer el ansiado jaque mate, escuché a alguien llamarme con insistencia. En momentos cuando mis alucinaciones me perdían, era la voz de Inger quien con su ternura me rescataba de… entre las penumbras; aquel extraviado lugar, llamado caos. Arribé a Passau para participar en el campeonato del mundo de ajedrez, el “match del siglo”, y de inmediato sentí mi renacer. La ciudad de los tres ríos me acogió en su cauce. Mis sueños deshilachados junto a lo que había creído merecer fluían en esas aguas. Me maravillé, su belleza dependía tan poco de los recuerdos, ya fueran míos o históricos; la ciudad parecía renacer cada mañana. Todavía, cuando nostálgicamente vuelvo el rostro, puedo observar algunas de las viejas tabernas a donde concurrí en mi adolescencia en estado de embriaguez, y me atrajeron con su lindura desposeída los vicios carnales. Esta vez me instalé en casa de Emanuek Lasker, iniciado como yo en el ajedrez, aunque él instruido por su padre quien lo fogueó al llevarlo a los cafés donde ganaba dinero apostando en sus partidas. El estilo Lasker es enojosamente seco, aun así, vale la pena verlo y dejar sentado en los hechos sus grandiosos gambitos. Entre sus movimientos se olfatea la hilera de tardes donde atado de la cintura por el lazo ceñido por su progenitor, el padre se bebía en cerveza de trigo, las monedas ganadas mientras el hijo con furia mordía hasta al más audaz contrincante. Sentado ante el tablero, en una exhibición en un club de ajedrecistas, me han tocado las piezas negras, recurrentes en mis pesadillas. A lo lejos veo a un grupo de estudiantes y pienso en el camino recorrido por la intimidad de otras épocas. De repente, siento unos dedos descansar en mi hombro, me extienden la portada de un libro de ajedrez, Juicio y planteamiento de Max Euwe, y me piden un autógrafo. La mujer es hermosa, aunque aún adolescente. No sé si sea prudente invitarla a coger. Firmo el libro y se retira. Mi contrincante, Gari Kasparov, se impacienta. Percibo en esos sus ojos capaces de divisar el fondo del alma, la urgencia por expresarse en el juego. Bruscamente él se halló en medio de un inmenso campo de batalla, donde había que hacer frente en todas direcciones. Gano la partida con el desarrollo de la defensa holandesa, eminentemente agresiva. No soporto el engreimiento de los grandes maestros rusos como al bebedor de Sibirskaya, Alexander Alékhine. Ligero me retiro de allí, la mujer del autógrafo me guiña el ojo. Él seguía sentado, alta la cabeza, girándole los ojos similares a constelaciones desorbitadas en el universo del tablero.

Historias de valor para la infancia

Texto Edgar A. Aguirre VegaDiversa es una de las tantas palabras con las que hoy en día podríamos definir a la literatura. ¡Maravillosa diversidad! Y así como en lo es en general, también en lo particular; pues cada uno de los géneros aborda y emplea numerosas formas y formatos para presentar sus variados contenidos. La literatura infantil, por ejemplo, ha evolucionado, ha dejado de ser un género pequeño y de simple ocio para entrar a las grandes ligas, se ha vuelto un abanico de enormes posibilidades, una industria que ya no da marcha atrás.Podemos acercarnos a valorar los libros infantiles y juveniles desde diferentes parámetros, como el histórico, el literario o el ideológico, pues las funciones de la Literatura Infantil y Juvenil (LIJ) pueden resumirse en tres: iniciar el acceso a la representación de la realidad compartida por una sociedad, desarrollar el aprendizaje de las formas narrativas y servir como vehículo comunicativo y socializador de las nuevas generaciones.1 Aunque no siempre fue así; en América Latina, en la época precolombina, la oralidad fue la principal herramienta para que niñas y niños conocieran las historias que rodeaban a sus pueblos, mitos y leyendas eran compartidas pero sin ser realmente un producto para las infancias. Lo mismo sucedió en la Colonia, pues el sincretismo cultural únicamente propició el surgimiento de relatos como las fábulas moralizantes y sus objetivos puramente adoctrinantes. Durante la época de la colonia se trajeron libros infantiles impresos en España con un carácter pedagógico con el fin de educar a la infancia. Eran libros que presentaban valores patrióticos, morales y religiosos con niñas y niños modelos, obedientes y estereotipados. Solo a finales del siglo XIX encontramos a los verdaderos precursores de una literatura infantil auténtica que van a cambiar la sensibilidad y el modo de escribir. Van a aparecer ahora unos libros de carácter estético cuyos autores consideran al niño como receptor de estas lecturas. Estos nuevos escritores van a impulsar una literatura más libre protagonizada por niños reales que viven situaciones comunes a la realidad de Latinoamérica.2 La conciencia y plena visibilidad de la infancia y de lo que ésta representa permitió también la aparición de grandes figuras como el cubano José Martí, considerado el creador de una literatura infantil con rostro propio, escribiendo directamente a niñas y niños a través de La Edad de Oro, revista mensual que estaba «dedicada a los niños de toda América para que sepan cómo se vivía antes y se vive hoy en América y en las demás tierras». Los cuentos y poemas de José Martí constituyen un hito en la literatura infantil latinoamericana porque consideró al niño como receptor de lecturas. «Los niños saben más de lo que parece» escribe Martí estableciendo el perfil del niño al que se dirige: curioso, activo y con una capacidad receptiva superior a la que por entonces el sistema escolar tenía en cuenta.3 Así, en una larga lista y una extensa historia, se suman destacados precursores de esta literatura infantil latinoamericana: Rafael Pombo (Colombia), Monteiro Lobato (Brasil), Marcela Paz (Chile), Nicolás Guillén (Cuba), Carmen Lyra (Costa Rica), Joaquín Gutierrez (Costa Rica), Gabriela Mistral (Chile), Rubén Darío (Nicaragua), Francisco Gabilondo Soler, Cri Cri (México), Rafael Rivero Oramas (Venezuela), Pascuala Corona (México), Horacio Quiroga (Uruguay), Constancio C. Vigil (Argentina), José Sebastián Tallon (Argentina), Aquiles Nazoa (Venezuela), Óscar Alfaro (Bolivia) y Juana de Ibarbourou (Uruguay). Es tal la relevancia y el valor que este tipo de literatura ha logrado a través del tiempo, que desde 1967 —cada 2 de abril y coincidiendo con el nacimiento de Hans Christian Andersen— se celebra el Día Internacional del Libro Infantil, fecha instaurada por IBBY (Organización Internacional para el Libro Juvenil), colectivo internacional que busca un mejor entendimiento entre los pueblos a través de la literatura infantil, así como garantizar el acercamiento de la infancia a los libros. Anualmente, IBBY México publica una guía de libros infantiles y juveniles, una herramienta útil para quien desee identificar lecturas para el hogar, el aula o la promoción de la lectura. La lista se realiza a través de leer, evaluar y seleccionar novedades enviadas por las editoriales a un Comité Lector, y es clasificada por etapas: pequeños lectores, los que empiezan a leer, los que leen bien y grandes lectores. Además de la ficha bibliográfica, se integran la sinopsis, comentarios, temáticas, premios o reconocimientos, y un distintivo a aquellos catalogados como favoritos del comité. En 2023, por ejemplo, la guía —en su edición 35— destaca el trabajo de escritoras y escritores como Abigail Rodríguez Contreras (México) con Arrullo de luciérnagas. Nanas en lenguas originarias de Puebla, ilustrado por Amanda Mijangos y Armando Fonseca; María Baranda (México) con Buscando a Sapo, ilustrado por Mariana Roldán; Micaela Chirif (Perú) y El mar, con ilustraciones de Armando Fonseca, Amanda Mijangos y Juan Palomino; Alexandra Castellanos Solís (México) con Gigante; José Ignacio Valenzuela (Chile) con ¿De qué color es tu sombra?, ilustrado por Pamela Medina; Verónica Prieto (Chile) con En la verde colina, e ilustraciones de Scarlet Narciso; Clementina Equihua (México) y ¿Cómo se protegen?, ilustrado por Amanda Mijangos; Roger Ycaza (Ecuador) con Clic; Cecilia Pisos (Argentina) con Coplitas con Preguntón, ilustrado por Eleonora Arroyo; Gabriela Olmos (México) con El sueño de los dioses y otros cuentos huicholes, ilustrado por José Benítez Sánchez; John Fitzgerald Torres (Colombia) y la ilustradora Paula Ortiz con La luna es un renacuajo; Verónica Murguía (México) y Mi monstruo Mandarino, con ilustración de Dani Scharf; Eduardo Otálora Marulanda (Colombia) y Mi primer Quijote, ilustrado por Paola Acevedo; Monique Zepeda (México) con Nicolás dos veces, ilustrado por Cecilia Rébora. El camino ganado no es cosa fácil, mucho menos con la brutal competencia que existe hoy en día en prácticamente todos los ámbitos. El papel de las editoriales es fundamental y notorio, la calidad de contenidos, formatos y, por supuesto, escritores e ilustradores es vital. A lo largo de Latinoamérica, existen casas editoriales y sellos que accionan y abonan al desarrollo de la literatura infantil, de entre ellas, los siguientes ejemplos: En México, Ediciones El Naranjo, Petra Ediciones, Ediciones Tecolote, Alboroto Ediciones y el Fondo de Cultura Económica con su colección A la orilla del viento; en Argentina, Pequeño editor, Limonero Ediciones, Editorial Ojoreja, Ediciones Iamiqué y Ediciones Urano; en Venezuela, Ediciones Ekaré y Playco Editores; en Colombia, Babel Libros, Editorial Tragaluz, Editorial Rey Naranjo, LuaBooks, Grupo Educar, Editorial Monigote y Cataplum Libros; en Brasil, Pallas Editora; en Chile, Editorial Amanuta y Editorial Forja, y en Perú, Editorial Crecer. Mientras que SM, Planeta, Penguin Random House, Libro del Zorro Rojo y Norma Editorial son algunas que no pertenecen al continente, pero sí mantienen una fuerte labor editorial dentro del territorio. Hoy, sin duda, una de las más sanas y robustas comunidades es la de la edición infantil, amplia, heterogénea y muy creativa, porque en ella se desarrollan muy diversos perfiles editoriales y porque el libro como objeto se interviene, a diferencia de otros sectores, de manera que pueda reunir distintos lenguajes para encantar y deleitar al lector. No solo el texto ocupa un lugar preponderante, sino que las ilustraciones, el diseño y el soporte mismo hacen parte de la mirada del editor. Por eso, cuando hablamos del tradicional oficio de editar, en el caso de los libros para niños, nos estamos refiriendo a una tarea más poliédrica y compleja.4 El valor de la literatura infantil es innegable, aunque también lo es la delgada línea de lo que se puede y no considerar como tal; las estructuras, temáticas, formatos y necesidades hacen que exista una enorme, muy enorme —y quizás hasta peligrosa— diversidad de productos, muchos de los cuales no ofrecen ni contribuyen a objetivos como la formación de lectores o el acercamiento a una literatura de calidad, sino que buscan fines meramente comerciales. …¿Y qué cosa es una literatura de calidad? Yo creo que es la que enseña a confiar a los niños en la palabra y que los adentra en el mundo del lenguaje, en la construcción del sentido a través de la palabra. Por eso es importante no caer en la idea de que porque los niños lean vayan a ser mejores personas o por alguna aproximación al libro va a haber un efecto mágico que nos convierta en algo mejor de lo que somos. Los libros no nos eximen del trabajo sobre nosotros mismos y de la responsabilidad que tenemos hacia los niños. Parte de esa responsabilidad es producir, escribir e ilustrar libros de calidad: que fomenten el espíritu crítico, que permitan un ejercicio de la libertad creativo, que convoquen a los lectores a forman parte, sin caer en lo panfletario o en lo didactista5, menciona la escritora peruana Micaela Chirif. Los retos siguen siendo muchos, pero la distancia recorrida y los avances son abismales en comparación con algunas décadas atrás. Los pabellones y programaciones infantiles en las ferias de libros son fundamentales y necesarios; la Feria Nacional del Libro de León, Fenal, es un claro ejemplo de ello —basta recordar que inició como Feria Nacional del Libro Infantil y Juvenil en 1990—, donde edición con edición se busca abordar y atender a la niñez con perspectivas que permitan la reflexión, el análisis y el entretenimiento a partir de las letras. El panorama de la literatura infantil en Latinoamérica se ha consolidado y ahora es protagonista en infinidad de espacios; acerquémonos. Referencias 1La literatura infantil y juvenil en las bibliotecas: fomentando el cuidado de la infancia | Extensión Universitaria en Sevilla | UNED. (s. f.). https://extension.uned.es/actividad/idactividad/32257 2Al. (2013, 30 julio). Informe LIJ. Precursores de la Literatura Infantil y Juvenil en América Latina. OBJETO:LIBRO. https://objetolibro.wordpress.com/2013/07/27/informe-lij-precursores-de-la-literatura-infantil-y-juvenil-en-america-latina/ 3Ibid. 4Team, L. (2023, 21 mayo). Edición de libros para niños, un contexto particular - Latin American Literature Today. https://latinamericanliteraturetoday.org/es/2023/03/edicion-de-libros-para-ninos-un-contexto-particular-2/ 5Sáliche, L. (2019, 15 noviembre). La literatura infantil y juvenil en América Latina, en la mirada de tres autores. Infobae. https://www.infobae.com/america/cultura-america/2019/11/15/que-momento-atraviesa-la-literatura-infantil-y-juvenil-en-america-latina/ -Editor Anonimo. (2023, 30 marzo). Las mejores editoriales infantiles de Latinoamérica - Editoriales Infantiles2022. Editoriales Infantiles. https://www.editoriales-infantiles.com/mejores-editoriales-infantiles-de-latinoamerica/ -Literatura infantil latinoamericana, Fanuel Hanán Díaz. (s. f.). https://www.dondevivenloslibros.com/2011/08/literatura-infantil-latinoamericana.html -Guía de libros infantiles y juveniles IBBY México 2023, https://www.ibbymexico.org.mx/wp-content/uploads/2023/03/Guia_IBBY-Libros_2023.pdf

Conoce un poco más de la escritora Rosa Montero

La escritora y periodista española Rosa Montero ha logrado múltiples premios, entre ellos la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes 2022. Algunas de sus más recientes obras son El peligro de estar cuerda, La ridícula idea de no volver a verte, La carne, entre otras. Hoy te presentamos algunos datos que tal vez no sabías de ella. 1.- Nombre y origen. Su nombre completo es Rosa Montero Gayo, nació el 3 de enero de 1951 en el barrio de Cuatro Caminos en Madrid, España. Hija de Amalia Gayo y Pascual Montero, novillero en los años 30. 2.- Aislamiento forzado. De niña, a los 5 años, padeció tuberculosis lo que la forzó a permanecer recluida en su casa hasta los 9 años. El aislamiento cultivó su profesión pues, al estar sola todo el día, se la pasaba leyendo y escribiendo. Sus primeros cuentos eran de ratitas que hablaban. 3.- Más de 20 idiomas. Su extensa obra la ha llevado a convertirse en uno de los referentes de la literatura contemporánea en castellano, además de que sus libros han sido traducidos a más de 20 idiomas. 4.- Estudios y trabajo. Cursó estudios de Periodismo y Psicología (carrera que abandonó) y al mismo tiempo colaboró con algunos grupos de teatro independiente como Tábano o Canon. En 1969 comenzó a trabajar como periodista publicando en diversos medios de comunicación (Pueblo Arriba, Mundo Diario, Hermano Lobo, Posible, Fotogramas, etc.) Desde 1976 trabaja para el diario El País. 5.- Maestros literarios. Rosa Montero menciona que entre sus maestros literarios están, en la parte más hiperrealista o incluso grotesca, Vladimir Nabokov, con quien ha comentado la unen elementos literarios como la mirada paradójica de la existencia y el sentido del humor; y en la parte fantástica, está Úrsula K. Le Guin, a quien Rosa describe como una escritoraza inmensa. 6.- Enamorada de Paul McCartney Cuando Rosa tenía 12 años estaba enamorada de Paul McCartney; al crecer y convertirse en periodista le tocó entrevistarlo cuando él tenía más de 50 años. “Todavía estaba viva Linda Eastman; estuvimos todo el día en su granja de Sussex. Linda nos trajo sandwichitos y té, luego pude ver cómo grababa el disco Flowers in The Dirt” (texto tomado de https://mascultura.mx/rosa-montero-y-el-poder-de-la-resiliencia/). 7.- Vivir para siempre. Le aterra la brevedad de la vida y, aunque le teme a la vejez, querría vivir para siempre. Más que morirse, resiente que tendrá que dejar la vida que ama y enfrenta con energía, humor y un colocarse justo al margen de las normas establecidas.