INSTITUTO CULTURAL DE LEÓN
INSTITUTO CULTURAL DE LEÓN

¡Participa en el XXVI Encuentro de Ajedrez!

Compartir:

El XXVI Encuentro de Ajedrez se realizará en el marco de la 35 Feria Nacional del Libro de León, Fenal, y ya está abierto el registro para niñas, niños, jóvenes y ajedrecistas en general que deseen participar.

A través de esta actividad, el Instituto Cultural de León, año con año, genera un espacio de encuentro y convivencia para las y los ajedrecistas; en esta ocasión se desarrollará el sábado 25 de mayo en Poliforum León.

Las y los interesados podrán participar en alguna de las siguientes categorías: menores de 10 años, menores de 12 años, menores de 14 años, menores de 16 años, primera fuerza (más de 1,900 de rating) y segunda fuerza (menos de 1,900 de rating). Los documentos requeridos son: copia de comprobante de domicilio vigente, copia de identificación oficial y constancia de situación fiscal, esto para la mayoría de edad; para los menores se solicitarán los mismos documentos (identificación y constancia del padre, madre o tutor), además de copia de acta de nacimiento del participante.

El registro se encuentra abierto desde este 08 de abril y hasta el 22 de mayo, con una cuota de recuperación de $102.00 por participante. Las inscripciones deberán hacerse preferentemente en la Casa de la Cultura Diego Rivera, de lunes a viernes de 9:00 a 17:00 horas. Quienes no puedan registrarse directamente, deberán contactarse a través de WhatsApp (477 704 78 30) para dar seguimiento oportuno.

Durante la competencia se utilizará el Sistema Suizo a cinco rondas, donde regirá la reglamentación vigente de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE); y criterio de desempates de encuentro directo, Buchholz, Sonneborn Berger y Color.

Respecto a la premiación, los primeros tres lugares en la categoría de menores de 10 años recibirán una dotación de libros, mientras que para el resto de las categorías, el primer lugar recibirá $1,500.00, el segundo $1,000.00 y el tercero $500.00.

La convocatoria completa se encuentra en bit.ly/ConvocatoriaXXVIEncuentroAjedrez. Para mayor información puedes presentarte en la Casa de la Cultura Diego Rivera o contactarte vía telefónica al 477 714 3350 o 477 716 9865, así como a los correos casaculturaleon@hotmail.com, iclcasaculturaleon@gmail.com.

Cabe destacar que, previo al desarrollo del Encuentro, el sábado 18 de mayo a las 10:00 horas y en la misma sede se llevarán a cabo una serie de Partidas Blitz, juegos rápidos de ajedrez abiertos al público en los que podrán participar desde los 5 años de edad, aprendiendo a gestionar o administrar el tiempo de manera eficaz. Las personas interesadas podrán acercarse a conocer más sobre la disciplina y convivir con ajedrecistas de diferentes edades que forman parte de los talleres de ajedrez impartidos en la Casa de la Cultura Diego Rivera.

Conoce las actividades del ICL en la página culturaleon.com, así como en redes sociales, Facebook: Instituto Cultural de León; Twitter, Instagram y TikTok: @culturaleon.


Noticias relacionadas

Xólotl: ¿Realidad o ficción?

Texto Victoria Salado Íñiguez “Me río para no llorar”, esa fue la sensación que experimenté al leer Xólotl; sentimientos encontrados. Y es que pasas de la diversión a la impotencia y, de allí, al enojo. Los cinco textos que lo conforman confrontan la realidad y con ello situaciones sociales tan cercanas de las que nos duele hablar.“El humor es un arma que nos permite sobrellevar las tragedias y desastres de la vida”1. En Xólotl, Jorge Luis Flores juega hábilmente con estas situaciones y explota, con creatividad, una hiperrealidad en donde lo que se lee y lo que se vive en León es apenas mera coincidencia.Los relatos, que tocan temas como el crimen, la religión y las altas pasiones, están ubicados en un contexto del México actual y son abordados con ironía; por sus tintes sarcásticos recuerdan el estilo de Ibargüengoitia, quien también gustaba escribir de su contexto y la cruda realidad desde el humor. El título de la obra parte de uno de sus cuentos, el cual narra la historia de una empresa que tiene detrás a sectarios ricos que rinden culto a un dios prehispánico, pero todo se sale de control. Personalmente, mi cuento favorito es Galatea, que comienza con el robo de una estatua, pero la situación llega a la obsesión y la perturbación humana hasta tener un trágico final; mientras que en De película muestra un juego kármico con los personajes principales, mandatarios de policía que tienen que lidiar con el absurdo de la resurrección y el eterno retorno de los cadáveres con crímenes sin resolver. Esto es solo una prueba de lo que puedes encontrar en este libro. Te invitamos a adentrarte en sus páginas y descubrir la realidad aumentada que nos ofrece el autor, quien además es traductor y locutor de pódcast; un escritor visiblemente informado y con un amplio bagaje de referencias culturales. Xólotl Autor: Jorge Luis Flores Género: Cuento Editorial: Ocelote Costo: $249.00 IG: Editorial Ocelote Referencia 1 de Medios, D. (2009, agosto 15). La Jornada: Reímos para no llorar, pero al humor no se le estudia como se debe, dice El Fisgón. La Jornada. https://www.jornada.com.mx/2009/08/16/cultura/a04n1cul

Historias de valor para la infancia

Texto Edgar A. Aguirre VegaDiversa es una de las tantas palabras con las que hoy en día podríamos definir a la literatura. ¡Maravillosa diversidad! Y así como en lo es en general, también en lo particular; pues cada uno de los géneros aborda y emplea numerosas formas y formatos para presentar sus variados contenidos. La literatura infantil, por ejemplo, ha evolucionado, ha dejado de ser un género pequeño y de simple ocio para entrar a las grandes ligas, se ha vuelto un abanico de enormes posibilidades, una industria que ya no da marcha atrás.Podemos acercarnos a valorar los libros infantiles y juveniles desde diferentes parámetros, como el histórico, el literario o el ideológico, pues las funciones de la Literatura Infantil y Juvenil (LIJ) pueden resumirse en tres: iniciar el acceso a la representación de la realidad compartida por una sociedad, desarrollar el aprendizaje de las formas narrativas y servir como vehículo comunicativo y socializador de las nuevas generaciones.1 Aunque no siempre fue así; en América Latina, en la época precolombina, la oralidad fue la principal herramienta para que niñas y niños conocieran las historias que rodeaban a sus pueblos, mitos y leyendas eran compartidas pero sin ser realmente un producto para las infancias. Lo mismo sucedió en la Colonia, pues el sincretismo cultural únicamente propició el surgimiento de relatos como las fábulas moralizantes y sus objetivos puramente adoctrinantes. Durante la época de la colonia se trajeron libros infantiles impresos en España con un carácter pedagógico con el fin de educar a la infancia. Eran libros que presentaban valores patrióticos, morales y religiosos con niñas y niños modelos, obedientes y estereotipados. Solo a finales del siglo XIX encontramos a los verdaderos precursores de una literatura infantil auténtica que van a cambiar la sensibilidad y el modo de escribir. Van a aparecer ahora unos libros de carácter estético cuyos autores consideran al niño como receptor de estas lecturas. Estos nuevos escritores van a impulsar una literatura más libre protagonizada por niños reales que viven situaciones comunes a la realidad de Latinoamérica.2 La conciencia y plena visibilidad de la infancia y de lo que ésta representa permitió también la aparición de grandes figuras como el cubano José Martí, considerado el creador de una literatura infantil con rostro propio, escribiendo directamente a niñas y niños a través de La Edad de Oro, revista mensual que estaba «dedicada a los niños de toda América para que sepan cómo se vivía antes y se vive hoy en América y en las demás tierras». Los cuentos y poemas de José Martí constituyen un hito en la literatura infantil latinoamericana porque consideró al niño como receptor de lecturas. «Los niños saben más de lo que parece» escribe Martí estableciendo el perfil del niño al que se dirige: curioso, activo y con una capacidad receptiva superior a la que por entonces el sistema escolar tenía en cuenta.3 Así, en una larga lista y una extensa historia, se suman destacados precursores de esta literatura infantil latinoamericana: Rafael Pombo (Colombia), Monteiro Lobato (Brasil), Marcela Paz (Chile), Nicolás Guillén (Cuba), Carmen Lyra (Costa Rica), Joaquín Gutierrez (Costa Rica), Gabriela Mistral (Chile), Rubén Darío (Nicaragua), Francisco Gabilondo Soler, Cri Cri (México), Rafael Rivero Oramas (Venezuela), Pascuala Corona (México), Horacio Quiroga (Uruguay), Constancio C. Vigil (Argentina), José Sebastián Tallon (Argentina), Aquiles Nazoa (Venezuela), Óscar Alfaro (Bolivia) y Juana de Ibarbourou (Uruguay). Es tal la relevancia y el valor que este tipo de literatura ha logrado a través del tiempo, que desde 1967 —cada 2 de abril y coincidiendo con el nacimiento de Hans Christian Andersen— se celebra el Día Internacional del Libro Infantil, fecha instaurada por IBBY (Organización Internacional para el Libro Juvenil), colectivo internacional que busca un mejor entendimiento entre los pueblos a través de la literatura infantil, así como garantizar el acercamiento de la infancia a los libros. Anualmente, IBBY México publica una guía de libros infantiles y juveniles, una herramienta útil para quien desee identificar lecturas para el hogar, el aula o la promoción de la lectura. La lista se realiza a través de leer, evaluar y seleccionar novedades enviadas por las editoriales a un Comité Lector, y es clasificada por etapas: pequeños lectores, los que empiezan a leer, los que leen bien y grandes lectores. Además de la ficha bibliográfica, se integran la sinopsis, comentarios, temáticas, premios o reconocimientos, y un distintivo a aquellos catalogados como favoritos del comité. En 2023, por ejemplo, la guía —en su edición 35— destaca el trabajo de escritoras y escritores como Abigail Rodríguez Contreras (México) con Arrullo de luciérnagas. Nanas en lenguas originarias de Puebla, ilustrado por Amanda Mijangos y Armando Fonseca; María Baranda (México) con Buscando a Sapo, ilustrado por Mariana Roldán; Micaela Chirif (Perú) y El mar, con ilustraciones de Armando Fonseca, Amanda Mijangos y Juan Palomino; Alexandra Castellanos Solís (México) con Gigante; José Ignacio Valenzuela (Chile) con ¿De qué color es tu sombra?, ilustrado por Pamela Medina; Verónica Prieto (Chile) con En la verde colina, e ilustraciones de Scarlet Narciso; Clementina Equihua (México) y ¿Cómo se protegen?, ilustrado por Amanda Mijangos; Roger Ycaza (Ecuador) con Clic; Cecilia Pisos (Argentina) con Coplitas con Preguntón, ilustrado por Eleonora Arroyo; Gabriela Olmos (México) con El sueño de los dioses y otros cuentos huicholes, ilustrado por José Benítez Sánchez; John Fitzgerald Torres (Colombia) y la ilustradora Paula Ortiz con La luna es un renacuajo; Verónica Murguía (México) y Mi monstruo Mandarino, con ilustración de Dani Scharf; Eduardo Otálora Marulanda (Colombia) y Mi primer Quijote, ilustrado por Paola Acevedo; Monique Zepeda (México) con Nicolás dos veces, ilustrado por Cecilia Rébora. El camino ganado no es cosa fácil, mucho menos con la brutal competencia que existe hoy en día en prácticamente todos los ámbitos. El papel de las editoriales es fundamental y notorio, la calidad de contenidos, formatos y, por supuesto, escritores e ilustradores es vital. A lo largo de Latinoamérica, existen casas editoriales y sellos que accionan y abonan al desarrollo de la literatura infantil, de entre ellas, los siguientes ejemplos: En México, Ediciones El Naranjo, Petra Ediciones, Ediciones Tecolote, Alboroto Ediciones y el Fondo de Cultura Económica con su colección A la orilla del viento; en Argentina, Pequeño editor, Limonero Ediciones, Editorial Ojoreja, Ediciones Iamiqué y Ediciones Urano; en Venezuela, Ediciones Ekaré y Playco Editores; en Colombia, Babel Libros, Editorial Tragaluz, Editorial Rey Naranjo, LuaBooks, Grupo Educar, Editorial Monigote y Cataplum Libros; en Brasil, Pallas Editora; en Chile, Editorial Amanuta y Editorial Forja, y en Perú, Editorial Crecer. Mientras que SM, Planeta, Penguin Random House, Libro del Zorro Rojo y Norma Editorial son algunas que no pertenecen al continente, pero sí mantienen una fuerte labor editorial dentro del territorio. Hoy, sin duda, una de las más sanas y robustas comunidades es la de la edición infantil, amplia, heterogénea y muy creativa, porque en ella se desarrollan muy diversos perfiles editoriales y porque el libro como objeto se interviene, a diferencia de otros sectores, de manera que pueda reunir distintos lenguajes para encantar y deleitar al lector. No solo el texto ocupa un lugar preponderante, sino que las ilustraciones, el diseño y el soporte mismo hacen parte de la mirada del editor. Por eso, cuando hablamos del tradicional oficio de editar, en el caso de los libros para niños, nos estamos refiriendo a una tarea más poliédrica y compleja.4 El valor de la literatura infantil es innegable, aunque también lo es la delgada línea de lo que se puede y no considerar como tal; las estructuras, temáticas, formatos y necesidades hacen que exista una enorme, muy enorme —y quizás hasta peligrosa— diversidad de productos, muchos de los cuales no ofrecen ni contribuyen a objetivos como la formación de lectores o el acercamiento a una literatura de calidad, sino que buscan fines meramente comerciales. …¿Y qué cosa es una literatura de calidad? Yo creo que es la que enseña a confiar a los niños en la palabra y que los adentra en el mundo del lenguaje, en la construcción del sentido a través de la palabra. Por eso es importante no caer en la idea de que porque los niños lean vayan a ser mejores personas o por alguna aproximación al libro va a haber un efecto mágico que nos convierta en algo mejor de lo que somos. Los libros no nos eximen del trabajo sobre nosotros mismos y de la responsabilidad que tenemos hacia los niños. Parte de esa responsabilidad es producir, escribir e ilustrar libros de calidad: que fomenten el espíritu crítico, que permitan un ejercicio de la libertad creativo, que convoquen a los lectores a forman parte, sin caer en lo panfletario o en lo didactista5, menciona la escritora peruana Micaela Chirif. Los retos siguen siendo muchos, pero la distancia recorrida y los avances son abismales en comparación con algunas décadas atrás. Los pabellones y programaciones infantiles en las ferias de libros son fundamentales y necesarios; la Feria Nacional del Libro de León, Fenal, es un claro ejemplo de ello —basta recordar que inició como Feria Nacional del Libro Infantil y Juvenil en 1990—, donde edición con edición se busca abordar y atender a la niñez con perspectivas que permitan la reflexión, el análisis y el entretenimiento a partir de las letras. El panorama de la literatura infantil en Latinoamérica se ha consolidado y ahora es protagonista en infinidad de espacios; acerquémonos. Referencias 1La literatura infantil y juvenil en las bibliotecas: fomentando el cuidado de la infancia | Extensión Universitaria en Sevilla | UNED. (s. f.). https://extension.uned.es/actividad/idactividad/32257 2Al. (2013, 30 julio). Informe LIJ. Precursores de la Literatura Infantil y Juvenil en América Latina. OBJETO:LIBRO. https://objetolibro.wordpress.com/2013/07/27/informe-lij-precursores-de-la-literatura-infantil-y-juvenil-en-america-latina/ 3Ibid. 4Team, L. (2023, 21 mayo). Edición de libros para niños, un contexto particular - Latin American Literature Today. https://latinamericanliteraturetoday.org/es/2023/03/edicion-de-libros-para-ninos-un-contexto-particular-2/ 5Sáliche, L. (2019, 15 noviembre). La literatura infantil y juvenil en América Latina, en la mirada de tres autores. Infobae. https://www.infobae.com/america/cultura-america/2019/11/15/que-momento-atraviesa-la-literatura-infantil-y-juvenil-en-america-latina/ -Editor Anonimo. (2023, 30 marzo). Las mejores editoriales infantiles de Latinoamérica - Editoriales Infantiles2022. Editoriales Infantiles. https://www.editoriales-infantiles.com/mejores-editoriales-infantiles-de-latinoamerica/ -Literatura infantil latinoamericana, Fanuel Hanán Díaz. (s. f.). https://www.dondevivenloslibros.com/2011/08/literatura-infantil-latinoamericana.html -Guía de libros infantiles y juveniles IBBY México 2023, https://www.ibbymexico.org.mx/wp-content/uploads/2023/03/Guia_IBBY-Libros_2023.pdf

Experiencias plasmadas en papel

En la categoría de cuento corto de los Premios de Literatura, Iván Medina fue reconocido con mención honorífica. “… Lo único que puede parar a la escritura sería la muerte, de lo contrario, puedes seguir imaginando y creando”. Te presentamos a Iván Medina, mención honorífica en la categoría de cuento corto de los Premios de Literatura León 2022 y autor de los libros: En cualquier lugar fuera de este mundo (CONACULTA 2012), Más frío que la muerte (UAM 2017) y Lugares Ajenos (BUAP 2020), además es autor de varios textos y colaboraciones en revistas como Granuja y la revista de la Universidad Autónoma de México. Iván es un artista multifacético que goza de la recopilación de conocimiento e información de su entorno. RCA: Iván, ¿Qué te motiva a escribir actualmente? Es diverso, no hay una sola respuesta, me motiva el expresar mi descontento, experiencias, enojos, satisfacciones y alegrías. No hay algo en particular (…) Escribo de acuerdo con lo que siento y lo que me llegue en ese momento de sentarme a escribir. RCA: ¿Cómo fueron tus inicios como autor ? Nació como algo fortuito. Me gusta mucho la música y por años me he dedicado a ella. Cuando estaba estudiando la carrera en Ejecución de Guitarra, para los sones escribía la décima espinela (una composición poética española muy arcaica), ahí fue donde comencé a escribir pero con la intención de recitar al momento de hacer fandangos. (También) Mientras estudiaba otra carrera se abre una convocatoria intercampus de literatura, ya tenía reparadas algunas décimas y las mandé, para mi sorpresa gané el primer lugar en poesía. Posteriormente, me entero de una convocatoria de la Revista Opción, mando una pequeña crónica y me lo publican, entonces me di cuenta que tenía algo que decir. RCA:¿Qué es lo que te llevó a ser artista? Decir artista es un concepto muy amplio. Yo ya componía, tocaba música y había participado en eventos musicales. En el ramo de la fotografía había obtenido algunos premios. Ahora que me estás preguntando, podría decir que era un artista por mi participación en la música y la fotografía, pero llegó con mayor fuerza la literatura para poder consolidarme como uno. RCA: ¿Te ha costado trabajo consolidarte?, ¿a qué retos te has enfrentado? Es un problema el darte a conocer y vivir de eso. Me acaba de llegar un correo de una revista de Ciudad Juárez, me habían elegido un cuento y me acaban de decir que ya no me van a publicar porque ya está publicado en otro lugar. En los concursos es diferente, porque ahí sí estoy de acuerdo que las obras sean inéditas (aunque) también es importante mencionar que necesitas de las revistas para darte a conocer. Otro problema ha sido llegar a las editoriales, generalmente no te publican porque buscan autores de peso. RCA: ¿Qué temas y autores te han inspirado? La lectura es muy importante, sin embargo, estoy más con la idea de Vygotsky y de Bajtín, que hablan más de la cuestión de la experiencia. La experiencia sobre la lectura. En cuanto a las temáticas que trabajo, son diversas. Estudié Relaciones Internacionales, hay un sinfín de asuntos con tintes políticos y sociales que afectan a la comunidad y de los que me inspiro. También la música tiene mucho que ver, yo creo que eso me ayudó a escribir de una manera diferente a una formación literaria. RCA:¿Cuál fue tu sentir al saberte parte de los Premios de Literatura León 2022 ? Fue de alegría, sorpresa y satisfacción, de sentirme reconocido ante mi labor literaria. RCA: ¿De qué va tu obra y qué necesidad satisface para ti como artista? Almendra surge de la intención de querer honrar la existencia de uno de los lugares míticos de la Ciudad de México, el Salón México. Construir una nostalgia de ese momento pasado que está ligado con la música y sobre todo con las intertextualidades, con el danzón y la obra de José Revueltas. Yo quería honrar tanto la música del danzón como al Salón México. Y así surgió, de repente reunes las ideas, lo cocinas en tu mente hasta que algo detona. RCA: ¿Qué representa para ti presentar tu pieza en Fenal 33? Es una satisfacción muy grata. Me siento honrado que reconozcan mi labor literaria. Además, siendo un estudiante del Doctorado en Literatura de la Universidad de Guanajuato, me siento con doble orgullo y me da los incentivos para seguir escribiendo y conocer a los nuevos escritores. RCA: Una pregunta extra para terminar ¿En qué estás trabajando actualmente? Estoy en espera de algunos dictámenes, tengo material de dos libros, espero sea positivo cualquiera de los dos son dos obras diferentes. Tengo algunas ideas que se están cocinando, pero insisto, este reconocimiento me da nuevos bríos para seguir creando y seguir. Yo creo que esto lo único que lo puede parar sería la muerte, de lo contrario, puedes seguir imaginando y creando todo con base a la imaginación y tus propios límites. Schack (Fragmento) El ajedrez no es como la vida… Es la vida. Justo como el teatro. Fernando Arrabal A Robert Fischer Seguido me veía ante mi contrincante observando el tablero. Yo jugaba con las piezas negras, aunque siempre opté por las blancas. Sus movimientos daban prueba de un arte tan exacto igual al del músico o el del pintor, donde todo cambia, los colores, las densidades, hasta el ritmo del aliento, y donde nos encontramos con la muerte o lo divino. Cuando a punto estuve de acometer el ansiado jaque mate, escuché a alguien llamarme con insistencia. En momentos cuando mis alucinaciones me perdían, era la voz de Inger quien con su ternura me rescataba de… entre las penumbras; aquel extraviado lugar, llamado caos. Arribé a Passau para participar en el campeonato del mundo de ajedrez, el “match del siglo”, y de inmediato sentí mi renacer. La ciudad de los tres ríos me acogió en su cauce. Mis sueños deshilachados junto a lo que había creído merecer fluían en esas aguas. Me maravillé, su belleza dependía tan poco de los recuerdos, ya fueran míos o históricos; la ciudad parecía renacer cada mañana. Todavía, cuando nostálgicamente vuelvo el rostro, puedo observar algunas de las viejas tabernas a donde concurrí en mi adolescencia en estado de embriaguez, y me atrajeron con su lindura desposeída los vicios carnales. Esta vez me instalé en casa de Emanuek Lasker, iniciado como yo en el ajedrez, aunque él instruido por su padre quien lo fogueó al llevarlo a los cafés donde ganaba dinero apostando en sus partidas. El estilo Lasker es enojosamente seco, aun así, vale la pena verlo y dejar sentado en los hechos sus grandiosos gambitos. Entre sus movimientos se olfatea la hilera de tardes donde atado de la cintura por el lazo ceñido por su progenitor, el padre se bebía en cerveza de trigo, las monedas ganadas mientras el hijo con furia mordía hasta al más audaz contrincante. Sentado ante el tablero, en una exhibición en un club de ajedrecistas, me han tocado las piezas negras, recurrentes en mis pesadillas. A lo lejos veo a un grupo de estudiantes y pienso en el camino recorrido por la intimidad de otras épocas. De repente, siento unos dedos descansar en mi hombro, me extienden la portada de un libro de ajedrez, Juicio y planteamiento de Max Euwe, y me piden un autógrafo. La mujer es hermosa, aunque aún adolescente. No sé si sea prudente invitarla a coger. Firmo el libro y se retira. Mi contrincante, Gari Kasparov, se impacienta. Percibo en esos sus ojos capaces de divisar el fondo del alma, la urgencia por expresarse en el juego. Bruscamente él se halló en medio de un inmenso campo de batalla, donde había que hacer frente en todas direcciones. Gano la partida con el desarrollo de la defensa holandesa, eminentemente agresiva. No soporto el engreimiento de los grandes maestros rusos como al bebedor de Sibirskaya, Alexander Alékhine. Ligero me retiro de allí, la mujer del autógrafo me guiña el ojo. Él seguía sentado, alta la cabeza, girándole los ojos similares a constelaciones desorbitadas en el universo del tablero.